Ayer, la actriz y productora Salma Hayek se unió a Pampers para lanzar “Un paquete = Una vacuna”, una campaña que forma parte de una iniciativa global de UNICEF que trabaja para proporcionar vacunas contra el tétanos a niños en países en desarrollo.

Con lágrimas en los ojos y la voz a punto de quebrarse, la nueva mamá habló de su preocupación por el bienestar de los niños de todo el mundo.

La actriz mexicana de 42 años -madre de Valentina Paloma, de 7 meses- explicó que a pesar de todos sus logros profesionales, lo mejor que ha hecho es convertirse en mamá, rol que sin duda la ha llevado para ayudar a los niños necesitados.

“Me inspira el programa ‘Un paquete = Una vacuna’. El tétanos es una enfermedad terrible que es completamente evitable cuando las mujeres en edad fértil se vacunan”, dijo Hayek en el lanzamiento de la campaña. “A través de este programa, los padres tienen el poder de ayudar a suministrar vacunas muy necesarias a través de UNICEF simplemente comprando un paquete de Pampers. Es un honor para mí unirme a Pampers y UNICEF en esta campaña para salvar vidas”.

¿Qué lección te ha dejado tu hija Valentina Paloma?

Todos los días aprendo de ella. No se me ocurre una sola cosa que decirte.

¿Alguna lección en particular que puedas compartir con nosotros?

No recuerdo uno. Hay tantos que mi cabeza está llena de ellos, ella es muy encantadora. Ella me hace reír todo el tiempo. Te cuento la lección que ella me ha enseñado: mi hija ríe todo el día y toda la noche, incluso cuando duerme, se ríe. Ella siempre está de buen humor. Tiene dos dientes pequeños y te los muestra. Ella siempre está riendo, y como se ríe tan hermosamente, es contagioso. Por eso ahora me río más que antes.

¿Cómo ha cambiado tu vida ser mamá?

Ha cambiado mucho mi vida. Pero [aparte de ser madre], si supieras lo que es para los niños que mueren de tétanos, a cualquiera se le rompería el corazón. Es una enfermedad terrible para estos bebés, porque cuando les cortan el cordón umbilical, quedan sellados con tierra que está completamente infectada con tétanos.

Y lo peor es que las mamás no lo saben. Evidentemente, siendo mamá, si tuviera que pedir un deseo sería tener un bebé sano. Cualquiera puede identificarse con eso. Pensar en esas mujeres y niños pobres, que no tienen idea de cómo se contagiaron y que están infectados con tétanos, me entristece porque es innecesario y se soluciona con cinco centavos.

¿Por qué decidiste formar parte de esta campaña?

Me encanta esta campaña porque nos da la oportunidad de ayudar a estos niños que están muriendo en vano, y todos podemos ayudar de una manera muy sencilla: comprando pañales que de todos modos hubiéramos comprado.

Por cada paquete de Pampers que compras y que tiene el sello de UNICEF “Un paquete = Una vacuna”, se administra una vacuna contra el tétanos en un país donde la bacteria está matando a muchos bebés. Cuando compras ese paquete de Pampers, inmediatamente se le aplica una vacuna para salvar la vida de uno de esos niños que está en peligro.

¿Cuál es el mensaje de la campaña?

La satisfacción de sentirse unida a otras madres, para salvar sus vidas y las de sus hijos. Podría ser un bebé en el Congo, en Madagascar, en diferentes partes de África, porque, a pesar de los problemas que tenemos en nuestros países, no tenemos el problema de esta enorme cantidad de muertes relacionadas con el tétanos cada tres minutos, algo eso es fácil de prevenir y resolver.